ART. DE UN PORTUENSE,

CON ESTOS VIENTOS LOS RESCODOS POLÍTICOS SE AVIVANARTÍCULO

ARTÍCULO DE: Celestino González Herreros

Como las veces anteriores, épocas preelectorales, ya comienza a enrarecerse el ambiente en las ciudades, los pueblos y las villas también, con las pancartas reivindicativas ofertando sus doctrinas políticas y anunciando la gran fiesta  electoral, con caras burlescas algunos y algunas; desafiantes y apariencias de buena gente, otros.. Los coches con sus radio parlantes vociferando a todo volumen las consignas preparadas para su  divulgación callejera. Total retratos que no dicen nada y voces exentas de contenido.  Será que sólo se trata de un concurso de simpatías… A ver quién queda mejor en la foto ante los ojos de los votantes. Hay algunos que da pena verles, como si no los conociéramos. Entre tanto, los días pasan presurosos y los vecinos ni se enteran. La verdad, hay de todo. Aquel que si vota por fulano es por que una vez lo invitó a participar en una comida que hizo el Partido suyo. El otro, por que su padre y el de él eran amigos. El del bigotito por que le debe un gran favor. El de más allá, por que toda su familia siempre han votado por ellos. El de más abajo, por que aunque no tiene estudios es muy trabajador… Y así sucesivamente, cada cual opina distinto y todos aspiran a más.

De cómo hay que gobernar con propios conocimientos acerca del concepto política y necesidades  de su municipio –que son cosas muy distintas- poco saben, ni por asomo. ¡Canta mañanas hay muchos¡ Sabihondos casi todos y verdaderos expertos en la materia, ni con lupa… Así pues, seguiremos de mal en peor y vayamos a saber, ¿dónde iremos a parar? En política no hay milagros, hay que currar mucho y ser muy honrado y respetuosos con sus conciudadanos, ante todo, los de su Partido y con aquellos que no lo son.

Cada Partido político, todas las veces que presentan sus respectivos programas electorales, dicen lo mismo que en ocasiones anteriores, hasta con los mismos puntos y las mismas comas, lo único que cambian y no siempre, son las caras. Hasta las intenciones son las mismas, a ver si esta vez  tienen más suerte… Y prueba evidente de ello, es que no cumplen lo que ofrecen, es que, cada nueva ocasión, copian del programa anterior aquello que no pudieron cumplir, bien sea por falta de dinero, de consenso, circunstancias y un largo etc., que se denomina: Justificaciones. Cuando dicen que no ha habido tiempo suficiente, olvidan del que han perdido con chorradas, disputas pueblerinas o rencillas personales que a nada bueno conducen, sólo eso, perder el tiempo miserablemente.

Entre tanto, nos vamos hundiendo cada vez más… Centenares de negocios fracasaron y con ello, esas familias se empobrecieron aceleradamente. Los autónomos y la pequeña y mediana empresa, aquellos que daban trabajo. Los capitales de las grandes empresas se han ido a otros lugares más atractivos con sus grandes capitales.

Y los Bancos progresan considerablemente, así los ricos cada vez son más ricos y los pobres más pobres. Los Bancos han acabado exprimiendo a la clase media hasta sacarles todo el poco jugo que de si  puedan dar. Se quedan con todo. Y nuestros respectivos gobiernos autonómicos en la Luna de Valencia, por la parte que les conviene.

Ya sólo falta que junto a cada Mesa Electoral coloquen una churrería y repartan, según la gente vaya depositando su voto, una tacita de chocolate y varias tiras de churros. Eso gusta mucho a la gente. Entonces puede ser que los comicios salgan adelante. ¡Churros y chocolate! ¡Gratis!

Nuestra economía necesita mucha seriedad, más de la que ha existido hasta el momento. Seriedad y compromiso. No se pueden dejar pasar los días tan pasivamente, sin preocuparle, casi,  a quienes tienen que implicarse y salvar la situación que estamos padeciendo. Hay que vivir el presente, donde están los verdaderos problemas clamando justicia y plena dedicación. No decir que a largo plazo hallaremos las soluciones pertinentes. Es nuestro acuciante presente el que exige a nuestros gobernantes que trabajen día a día, sin demoras ni descansos y sin estériles pretextos… Hay que detener la pérdida de tantas ocasiones que hemos tenido para frenar tantas crisis, pensando, como lo hacen, que hay tiempo disponible, que mañana será otro día… Lo que haya que hacerse hagámoslo ya. Los ejemplos sobran, para explicar que un desperfecto pequeño se hace grande y que al cabo de poco tiempo incorregible. Habría que empezar de nuevo y eso si que necesita mucho tiempo, al haber perdido las formas primitivas que haya brindado la oportunidad que tuvimos y que difícilmente volverá a repetirse.

Sólo necesitamos personas serias, bien formadas y responsables, capaces de torcer el equivocado paso que el destino y nuestra apatía ha señalado. Que nuestro Gobierno Canario se entere a tiempo y de una sana vez…