ARTÍCULO DE. Esteban Domínguez
No estamos los canarios de acuerdo con lo pactado entre don Paulino Rivero y don José Luis Rodríguez Zapatero. Todo viene a cuento porque el gobierno quiere aprobar sus presupuestos generales y no tenía mayoría, y la generosidad de don Paulino Rivero junto al PNV lo hacen posible. Ósea que la pesadilla que ZP tenía sobre sus espaldas, ha desaparecido. De lo contrario y sin el apoyo de estas dos fuerzas políticas la mayoría podía haber sido disipada. Ahora el gobierno respira más hondo e intenta relajarse, y don Paulino piensa que lo pactado con el jefe de gobierno central, se lo van a dar mañana mismo.
Ana María Oramas y Perestelo levantaran la mano a favor de los presupuestos, y nosotros aquí, seguiremos mas aplatanados que nunca, dándole nuestros votos a un grupo político como C.C. que nos vende en Madrid por un plato de lentejas, mientras el paro aumenta en las islas y el hambre está presente según Cáritas y que se detesta en muchos centros de las islas.
Mejor sería irnos comprando una caña de pescar por si proliferara la petición de don Paulino, y evitar pasar hambre, el cebo nos llegará de Madrid y los anzuelos desde la calle Ferrá. Mientras tanto Zapatero dice que seguirá gobernando en España, y la bola de cristal socialista así lo deja ver, pero lo que no sabemos es lo que ZP, pactó con los vascos, pero al tiempo, porque tampoco el PNV vende euros a cincuenta céntimos y la cosa no está como para echar cohetes en el País vasco, pero en política todo es posible, incluso la independencia, por la que vienen luchando desde hace muchos años.
Y si hablamos de abucheos ya no son solo los del 12 de octubre en la Castellana , sino los que ha recibido Manuel Chaves en Andalucía, en su tierra claro. De esta manera, se aprecia que los españoles piden un cambio de gobierno ya, porque esta situación en la que vivimos es insoportable y no hay quién la resista por muchos recortes que se quieran realizar.
Y para colmo, las pensiones no contributivas sólo aumentaran un 1%, esa es la limosna que los socialistas aportarán a los que padecen hambre y miseria. Y las contributivas se meterán en el congelador. Mientras el presidente del gobierno sus ministros y demás acuses, se llevarán la mayor parte de la tarta. Y por si fuera poco, el presidente intenta tener a su lado 630 asesores, que les cuesta a las arcas del Estado 30 millones de euros. Ahora falta saber que hace tanta gente detrás de Zapatero y si alguna vez los avisto a todos juntos, porque me da la impresión que el presidente no tiene tiempo ni para ver a tanto mangante, ni si quiera para saludarlos. Pero, así está España; patas arriba y sin saber que rumbo le van a dar los fieles amantes de la Patria.
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