lunes, 13 de diciembre de 2010

UN NORTEÑO,

DON ANTONIO, EL PÁRROCO
ARTÍCULO DE: Evaristo Fuentes Melián
Don Antonio Hernández ha sido  galardonado recientemente a título individual,  con el Premio Nacional del Voluntariado. Don Antonio,  párroco de la Concepción de La Orotava, lleva sus últimos veinte años practicando un arriesgado apostolado,  trabajando en estas islas por la lucha contra la droga.  
    ¡Bien por don Antonio!, lo felicito efusivamente. Más aún cuando días después me lo encuentro en los aledaños de su parroquia, paseándose con orgullo del bueno (del no pecaminoso), con un cubrecabeza, vulgo sombrero, de ala ancha, diríase que blanco y pajizo, un poco haciendo el payaso en el buen sentido, seguramente muy contento de que Felipe y Letizia, futuros Reyes de España, le hayan entregado dicho galardón en tierras de buen vino como es La Rioja.
   Una apostilla o poético estrambote (¡gracias!)  en clave de chanza debo añadir: quizá aún el efluvio riojano de sus caldos famosos hacía mella en don Antonio, con su esbelta figura, tocada con aquella especie de mitra popular. El día que ¡por fin! la Iglesia Católica, La Nuestra, permita el matrimonio terrenal a sus ministros del Señor, estoy seguro de que don Antonio encontrará ‘cantidubi’ de mujeres guapas dispuestas a ser sus sacramentales  esposas de por vida.
   Gracias, don Antonio, por llenar el entorno de su parroquia de un halo bendito. Espero que también lo felicite por tan importante premio, ‘kikireándoselo’ con la cresta alzada en señal de regocijo, el Gallo de San Pedro.
Espectador 

No hay comentarios:

Publicar un comentario