ARTÍCULO DE: José R. Peraza
Sabemos que todos tenemos una fecha, pero no sabemos cuándo nos toca, pero si hay momentos que notamos que se nos va acercando, hay que decir que, hay muchas clases de enfermedades, y la menos esperada los hace dejar este planeta.
Nuestro apreciable amigo de todos, nos ha dejado, para irse a descansar. El padre Antonio María Hernández, trabajo desde su niñez hasta los días de hoy, era una persona incansable que no tenía horario, trabajaba día y noche, por el bien de los demás.
El padre Antonio era, una persona más que responsable, toda una vida trabajando por los demás, ya no hablo de Santa Rita I o Santa Rita II. A trabajado duro, allá por donde ha pasado, ha dejado su huella, huella que no son muy corta, creo que en Canarias no habido un hombre uno como él.
Hay que decir que el padre Antonio, murió de tristeza y de impotencia, donde se mezclaron otras con ellas. Pero la mayoría fueron de tanto sufrimiento y de tanto engaños y promesas, por parte de las autoridades, Pienso y creo, que no hayan sido todos, pero sí de muchas persona o personajes, donde le pusieron tantas y tantas trabas, que le quitaban algunas horas de su sueño. Era una persona muy responsable. Sabía que llevaba una gran losas sobre sus espaldas, no era fácil de aliviarle y retírale algún peso de ella.
Era una personas sin mal idea, todos se lo creí, confiaba mucho en las palabras de cantidades de muchas promesas, las cuales no le llegaban ni la mitad.
Hay que decir que el padre Antonio, se encontraba rodeado de un buen equipo, que le era bien fiel, Por lo cual el padre confiaba en ellos. Estos son los que tendrán que coger las arrienda, y trabajaran con los pies en el suelo, con el fin de sacar esto adelante, y de esta manera, el padre Antonio, estará muy contento allá donde este, estoy seguro que, estará viendo cada movimiento que estaremos haciendo, hasta que llegue el momento de haber conseguido ese proyecto que todos estamos esperando como es el Centro de atención del alzhéimer, del cual hace cinco años esperando por su licencia, para hacer ese Edificio de investigación tan necesario, y pionero.
Esperemos que ahora, las autoridades en general, ponga las dos manos en trabajar por este cometido, del cual no lo hicieron en su día, espero que se reúnan todos para sacar esto adelante, ya que son ellos, los que tienes las riendas en sus manos, cosa que les pido de todo corazón. Ya que esta junta Directiva, también tendremos que trabajar bien duro por todos y cada unos de los abuelos y abuelas que se encuentran tanto en Santa Rita I como en Santa Rita II.
Podemos seguir escribiendo y escribiendo: pero mejor será dejar una líneas a ver cómo se desarrolla este comentado, el cual debemos de colaborara todos codo con codo. Desde aquí, solo le pido que descanse en paz, DONDE ESTAREMOS CON TIGO, ADIÓS PADRE ANTONIO HASTA SIEMPRE…
No hay comentarios:
Publicar un comentario